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Diversion en invierno

Aspen es el centro de esquí más famoso del mundo y el sitio perfecto para practicar snowboard

esquí

Ubicado en Colorado, E.U, el pueblito promete nieve para disfrutar de los saltos hasta abril del 2010.

 

Imposible no reconocerlos en el aeropuerto: gorritas con visera, pantalones anchos y pasos al ritmo de las últimas películas de Gus Van Sant. "Por favor, no escribas que somos una tribu urbana", piden antes del vuelo, cuando les cuentan que viajarán con un periodista.

El grupo está formado por dos profesionales del snowboard (deporte extremo que consiste en deslizarse por una pendiente cubierta de nieve sobre una tabla), pero también van un camarógrafo y un fotógrafo de montaña, una productora y el director de Gravedad Zero, programa del canal Espn.

Viajar con ellos es una buena manera de entender qué tiene de excepcional este punto del estado de Colorado, que rebosa de celebridades, convoca a esquiadores de todo el mundo y es sinónimo de turismo de élite.

Tras cambiar de avión en Denver (venimos de Washington), en menos de 30 minutos se llega hasta Aspen, un pueblo de montaña que cuenta con aeropuerto propio, toda una ventaja en relación con muchos centros de esquí.

Llegar en taxi hasta la villa cuesta unos 20 dólares, mientras que el bus público es gratis, además de rápido y cómodo. Su chofer es el primero en dar una buena impresión: "Bienvenidos, disfruten de mi ciudad", dice mientras espera que los recién llegados suban con sus maletas.

La estación central es una pequeña plaza en el centro. Todas las mañanas parten desde aquí la mayoría de los turistas hacia Aspen Highlands, Buttermilk o Snowmass, las tres montañas que conforman el complejo esquiable junto con Aspen Mountain, a un costado del pueblo.

El equipo de Gravedad Zero se hospeda en un condominio de tres pisos, cuatro habitaciones y varios televisores de plasma, además de jacuzzi en su terraza, como casi todos los apartamentos, hoteles y bares del centro. Estas piscinas de aguas humeantes, para disfrutar al aire libre incluso cuando cae nieve, son parte intrínseca del paisaje.

Además de los parques diseñados para hacer piruetas en las montañas, para ellos hay propuestas todas las noches. La calma pueblerina, sin embargo, nunca se pierde.

Salvo por el consumo de energía de los jacuzzis, la ciudad es un canto a la ecología. Circulan pocos autos gracias a los buses gratuitos, que usan biodiésel y llevan los esquíes en su exterior, para facilitar el viaje.

A los saltos, para la foto

Muchos pasajeros van aún más cómodos: no llevan consigo los equipos, porque los dejan sin cargo en la base de cada montaña. Incluso pueden pedir que los mismos, si son de alquiler, sean trasladados a otra base, para cambiar de escenario al día siguiente.

Entre las cuatro áreas hay más de 330 pistas, además de kilómetros de nieve virgen habilitados para quienes buscan salirse del margen. La estación más cercana al centro es Highlands, a unos diez minutos. "Es la que ofrece mayores pendientes. Tiene un snowpark interminable y el fuera de pista es único en el mundo", cuenta Nicolás Fuentes, de 24 años, uno de los snowboarders argentinos.

Vive en San Martín de los Andes, pero hace contratemporada en Europa (con base en Andorra). "Hace más de diez años practico este deporte y en los últimos seis lo hago como profesional", agrega.

La esencia de Aspen está en sus bares y montañas, pero también en la arquitectura, con un estilo particular que combina Bauhaus alemán, far west y algo de victoriano.

En este ambiente encantador tienen sus casas muchos ricos y famosos, sobre todo en los alrededores. Varios, incluso, decidieron quedarse. Por eso hay también encuentros culturales durante el año: para no quedar aislados, ellos organizan, por ejemplo, conciertos de figuras internacionales en pequeños reductos, porque traer grandes artistas es un lujo más que pueden darse.

De diciembre a marzo hay en las calles conciertos gratuitos casi todas las noches. También se organizan festivales de cine y muestras de arte. Nieve champagne.

La montaña Aspen, conocida como Ajax por los locales, no tiene pistas verdes. Snowmass es casi una ciudad aparte, con condominios que crecen a su alrededor.

Y Buttermilk es la más buscada por los principiantes, pero también por los más extremos, por su parque de estilo libre donde se realizan los famosos Winter X Games, en enero. "Tiene un pipe con paredes de siete metros", cuenta Andy Barroso, de 29 años, otro de los profesionales. El pipe es una canaleta de nieve gigante para ir a los saltos entre una pared y otra.

Al arribar a cualquiera de las montañas, uno deja sus pertenencias en casilleros sin llave; difícilmente alguien tocará algo que no sea suyo. Luego recibe un protector solar y crema humectante, gratis, como el agua mineral y el café que se pueden beber en todos los puestos de descanso.

Y después se desliza por nieve champagne, como la llaman, en pistas anchas enmarcadas con álamos. Pueden llegar miles de personas, pero uno siempre se siente esquiando solo, porque hay espacio para todos.

Nuevamente en Highlands, el almuerzo es en Cloud 9 Restaurant, para ver la nevada entre fondues de queso y raclettes de ajo (pregunte por las opciones nocturnas para comer aquí, donde se llega en caravana con motos de nieve).

Dos esquiadores de rojo esperan a la salida: son los patrulleros que, a las 4 p.m., empiezan a acompañar el descenso de los rezagados. La visibilidad es buena, pero el grupo de Gravedad Zero desaparece en un par de segundos. Es la montaña más complicada, pero ellos no precisan escoltas para regresar. 

Si usted va

Los colombianos necesitan visa para entrar a E.U. Se puede ir a Washington, Houston, Atlanta, Nueva York o Miami, hacer conexión con Denver y de ahí volar a Aspen.

Aspen/Snowmass ofrece una promoción para sus medios de elevación y alquiler de equipos: al adquirir los pases y alquilar la indumentaria con anticipación a la fecha de llegada, el pasajero que paga 8 días recibirá 6 más sin costo, para sumar dos semanas. Informes: www.aspensnowmass.com

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